La pandemia ya pasó y el covid pasó a ser una enfermedad similar a la gripe pero en Lar tenemos un protocolo creado por el equipo médico para minimizar los riesgos asociados a esta enfermedad que sigue en circulación. Acá te contamos algunas de las medidas que hemos tomado.
Como todos sabemos, este virus apareció a finales de 2019 y tiene una alta contagiosidad por vía aérea. Su gravedad ha disminuido debido a las medidas tomadas y a que las variantes más débiles han sido las que perduraron.
Por suerte hoy en día conocemos mejor su comportamiento y contamos con una variedad más amplia de herramientas para evitar su propagación y tratar sus efectos.
Vacunación
A pesar de que la vacunación no es obligatoria, sigue siendo la principal medida preventiva en la población más vulnerable, como es el caso de los adultos mayores. Por eso desde Lar fomentamos la vacunación y el refuerzo periódico para que nuestros residentes tengan los anticuerpos necesarios.
Si bien la vacunación no impide contraer la enfermedad, sí reduce drásticamente su mortalidad y los efectos negativos. Hoy en día, una persona vacunada que contrae la enfermedad normalmente lo pasa como una simple gripe, resfrío o de manera asintomática.
Seguimiento de casos
La trazabilidad de la enfermedad es clave para detener su propagación. Por eso en Lar realizamos tests a residentes que por su sintomatología puedan tener Covid.
Uso de tapabocas
Este accesorio que nos acompañó durante dos años a diario hoy sigue siendo una herramienta muy eficaz para detener el contagio. Cuando se detecta algún caso en nuestro centro, implementamos el uso obligatorio para las personas que no viven en el centro, incluido los visitantes.
Aislamiento voluntario
Debido a que contamos con habitaciones individuales, cuando detectamos un caso positivo informamos al residente y su familia sobre la enfermedad y su alta contagiosidad, y pedimos su consentimiento para ubicarlo en una habitación para que curse la enfermedad.
De esa manera garantizamos su bienestar y su cuidado, y evitamos que la enfermedad se siga propagando a residentes y funcionarios.
Desinfección
Esta medida tan sencilla y conocida sigue siendo muy efectiva. Por eso desinfectamos los principales objetos que son vectores de la enfermedad: vajilla, baños, picaportes, etc.
Además, contamos con un sistema de ventilación que renueva el aire y ventilamos a diario los diferentes ambientes.
Por suerte hoy el covid no representa una amenaza para la inmensa mayoría de nosotros. Seguir aplicando los aprendizajes que nos han dado estos años es fundamental para que la enfermedad no cause daños graves, especialmente en las poblaciones vulnerables. ¡Nos seguimos cuidando entre todos!